lunes, 11 de junio de 2012

Las Mejores Universidades

Hace unas semanas se publicaron los últimos rankings de las mejores universidades en varios periódicos. Hasta los autobuses de la EMT de Valencia llevan una publicidad recordando que la UPV forma parte de las 100 mejores universidades "jóvenes". Parece que es un tema de moda, ahora que nuestro sistema educativo está en entredicho. Yo no me considero capacitado para juzgar si  están o no a buen nivel, pero sí para contar mi experiencia.

Quizás yo sea un idealista, pero uno de los mayores problemas de nuestras universidades es la falta de vocación del profesorado. Impartir formación no puede considerarse un trabajo más, ya que las repercusiones de un mal trabajo por parte de un profesor, son mucho más dañinas de lo que nos creemos. Los hay que destrozan vocaciones y crean profesionales inseguros y frustrados. También tenemos los que enseñan conocimientos del siglo pasado (me refiero al XIX no os vayáis a creer) con la excusa de que son muy didácticos. Los hay, que durante toda su trayectoria docente, han sido incapaces no ya de publicar un libro, que sería lo normal, sino siquiera de poner a disposición de los alumnos unos apuntes de su asignatura aprovechables.

Vayamos a lo fundamental: ¿cuántos profesores de universidad tienen vocación?. Yo contesto el primero: muy pocos. Es más, a la gran mayoría, los alumnos les suponen una molestia, una peaje que tienen que pagar para poder llevar a cabo sus otras actividades.

Y es triste, me duele mucho decirlo, pero después de pasar por seis cursos en la  Escuela Técnica Superior de Ingenieros de Caminos Canales y Puertos, puedo contar con los dedos de una mano (y me sobran algunos dedos) los profesores de verdad que he tenido, esos que te transmiten conocimientos, te guían en tu aprendizaje, que disfrutan de verdad dando clase, en definitiva profesores con vocación. Y no creo que sea por falta de conocimientos técnicos, más bien es por falta de conocimientos pedagógicos y motivación.

Seguramente en la selección de personal, reside uno de los problemas, en lo criterios de selección. No conozco ningún baremo de selección dónde se prime, o simplemente se valore cualquier aspecto que tenga que ver con la formación docente.

El resultado, es que las escuelas técnicas imparten una formación con muchas carencias en el fomento del trabajo en equipo, la capacidad de investigar e innovar, la formación en idiomas, y muchos otros aspectos en lo que claramente somos deficitarios.


@El Ingeniero del Futuro.


Saludos.